250 g de polenta
250 g de mantequilla
½ litro de agua
½ litro de leche
50 g de queso parmesano rallado
1 diente de ajo rallado
½ cáscara de lima rallada y su jugo
2 pimientos Sweet Palermo® asados
durante 5 min a 170 grados pelados y
cortados en tiras
Pétalos de Salanova®
1 cucharada de vinagre balsámico blanco
1 cucharada de salsa hoisin
Sal
En una olla ponemos el agua y la leche a hervir con sal y, cuando hierva, agregamos la polenta sin dejar de batir para evitar los grumos. Se cocina a fuego alto y cuando espesa lo bajamos al mínimo. Agregamos el queso y la mantequilla, mezclamos y cuando empiece a abrirse retiramos del calor. Transferir la masa en un molde, rustidera o bandeja honda; emparejar la superficie y dejar enfriar.
1 diente de ajo rallado , ½ cáscara de lima rallada y su jugo, 2 pimientos Sweet Palermo®
asados durante 5 min a 170 grados pelados y cortados en tiras, 1 cucharada de vinagre balsámico blanco, 1 cucharada de salsa hoisin, sal y aceite de oliva extra virgen. Una vez fría ya la polenta cortaremos en cuadrados de 10 × 10 cm aproximadamente y procedemos a emplatar colocando como base la polenta. Añadimos con ayuda de una cuchara el salteado de pimientos templados y disponemos unos pétalos de Salanova, unas finas láminas de parmesano y unas gotitas de balsámico. Se puede servir templado o frío.